VITAMINAS PARA EL ALMA: ALMAS GRANDES.
Muchas personas han hecho brillar la esperanza más que todas las estrellas del cielo en la noche y han ayudado a otros cuando sus sufrimientos eran espantosos y su malestar enorme, pero a pesar de todo han podido confiar en las personas y han obtenido respuesta a su oración, creyendo con George Meredith que “el que después de la oración abriga mejores sentimientos ha obtenido ya respuesta a sus súplicas”.